sábado, 3 de julio de 2010

Sublimar la percepción

Dice Enric González que “ninguna victoria es tan bella como un buen fracaso”, cierto, pero incompleto. Enric, gran escritor y contador de historias, olvida que, además, no hay nada más bello que el fracaso de un coloso, ni siquiera el triunfo de un pequeño. Mientras la victoria engrandece el alma, la derrota la trasluce y la vuele más humana, más terrenal.

Lo ocurrido hoy en Port Elizabeth fue inesperado, y tremendamente bello. La alegría holandesa al final del partido, quizá y sólo quizá, puede ser considerada justicia poética, como las derrotas de Italia y Francia, y las victorias de Argentina, pero la tragedia brasilera evoca los sentimientos más profundos de humanidad que, aquellos que sentimos este deporte como sangre en las venas, podamos sentir. Estética pura. Eso fue lo que representó Brasil en la Copa Mundo. Y que no se confunda, estética desde el significado filosófico, que es el más bello que pueda haber.

Y lo más trágico de todo es que Brasil, el coloso más colosal del planeta fútbol, era bellísimo. Brasil destilaba belleza. Ese ritmo lento adormecía los sentidos y levantaba las sensaciones, sublimaba la percepción y el subconsciente. Brasil es inspiración colectiva y, ateniéndonos al ensayo sobre lenguaje y fútbol de Pier Paolo Pasolini, tendríamos que decir que Brasil es la prosa de Milan Kundera. Brasil es Kundera, y Kundera es la manta que abruma el intelecto y exalta el grado más alto de sensibilidad. Brasil también es Shine On You Crazy Diamond de Pink Floyd, y Brasil es la definición futbolística del último álbum de Jorge Drexler, Amar la Trama. A Brasil no le importaban los goles, sabían que al final siempre llegaban, a Brasil le importaba la sensación previa.

Pero, sobre todas las cosas, Brasil es Robinho. Tratar de explicar este Brasil sin mencionar a Robinho es como describir a la Argentina y no hablar de fútbol. Lo segundo puede explicar el resto por sí solo, pero el resto no puede hacerlo sin ello. Robinho es sublime. Cada pase, cada pausa, cada paso, cada toque es un control de los espacios, es la respuesta a un estímulo y la creación de una sensación. Para quien escribe, Robinho es huracán de percepciones ¿Qué va a hacer? ¿Qué hizo? ¿Para qué? ¿Por qué? ¿Con qué sentido? ¿Hacia dónde va? ¿Qué dirección tomará? Se dibujan en mi mente en los instantes en que el brasilero aparece en la pantalla y, al final de la jugada, siempre, siempre sonrío porque Robinho es único. Seguro Cruyff se refería a eso cuando decía aquello de “gallina de piel”.

Es quizá por eso, por Robinho, que Brasil me gustó tanto, me transmitió tanto. Por allá en 2007 cuando Dunga ganaba la Copa América, Brasil no me gustaba. Hace un año cuando ganó la Copa Confedereaciones, Brasil tampoco me gustaba. Era la Brasil de Dunga, un gran equipo, pero no me llenaba la vena estética. La Brasil de Sudáfrica fue más la Brasil de Robinho y menos la Brasil de Dunga. No estuvieron Ronaldinho, ni Hernanes, ni Marcelo, pero qué más da ahora. Estuvo Robinho, y Robinho fue amo y señor de la pelota. Eso siempre se agradece.

Se va Brasil y se va Robinho. También se va Dunga. El gran campeón jugó un fútbol muy bello, y perdió con el campeón sin corona que jugó horrible. Ironías del fútbol que mientras termino de escribir esto regala un final de infarto a Uruguay, por aquello de que con Francescoli no pasó, y le hace pasar un trago amargo a Ghana qué también fue una prosa muy bien escrita. Se fue Brasil. Hay “Saudade”. El mundial continua, pero este día difícilmente puede ser superado en belleza y contenido épico.

martes, 29 de junio de 2010

Dominio Total


Confieso que el mejor equipo que he podido ver es la selección Brasil que participó en la Copa Mundial de Fútbol de España 1982, y que se fue eliminada tras perder el triangular, posterior a la primera fase, en el que se enfrentó a la Argentina de Menotti, a la cual ganó, y a la Italia de Bearzot, a la postre campeona del mundo, que los venció 3-2 en uno de los partidos de mayor calidad y más bonitos de la historia del fútbol.

Brasil 82’ derrochaba fútbol en cada una de sus líneas y movimientos, y, además eran bonitos. Eran técnica, física y tácticamente buenísimos, y literalmente barrían a todos los equipos que enfrentaban. Eran superiores a todos, lo sabían, y sólo dos fallos de concentración de un clase mundial como Júnior pudieron, sin restarle méritos al gran conjunto italiano del 82’, arrebatarles un titulo que debió ser para ellos. Competir con la imagen mediática de Brasil 70’, sin haber sido campeones del mundo, ya habla lo suficientemente bien por aquel equipo de Telé Santana, pues eso es algo que ni siquiera “La Naranja Mecánica” logró.

Brasil modelo 2010 dista mucho de ser Brasil 82’, tampoco aspiran a serlo, empezando porque, por ejemplo, los puestos que hoy ocupan Bastos, Melo, Silva y Elano, pertenecieron a Júnior, Falcao, Cerezo y Sócrates en el mítico equipo, sin embargo, han pasado veintiocho años desde eso y la selección brasilera, por la que han pasado genios como Romario, Rivaldo, Ronaldo, Roberto Carlos o Ronaldinho, nunca se había sentido tan superior al resto, tan dominante, tan ama del partido.

Y Brasil, por encima de todo, es eso. El Brasil de Dunga es el dominio absoluto del partido. Hace un par de días escribí en Twitter que Brasil había venido a África de Safari con unos cuantos dardos somníferos y un par de dardos mortales. Creo que nunca una metáfora tan mala ha sido tan acertada a la realidad. Brasil duerme el partido, impone su ritmo lento, a veces muy lento, saca al rival del partido y, de repente, cuando menos lo esperas, sube el ritmo de forma violenta, pero sutil y suavizada por fútbol, y te marca uno, dos, tres goles o los que crean suficientes. El mensaje es claro: “Somos los mejores, somos los dueños del partido y hacemos con él lo que queremos”.

Soy el primero que crítica a Dunga por ponerse el mismo un límite demasiado bajo para que lo que podría dar Brasil. Jugadores como Marcelo, Hernanes, Diego, Pato, Ronaldinho, Ganso o Neymar le hubieran dado un límite a Brasil muchísimo más alto e igual de competitivo e igual de ganador. También soy el primero que aplaude su trabajo porque ha creado el mejor equipo del mundial, el único que ha demostrado empaque de campeón. Brasil es buenísimo táctica, técnica, física y futbolísticamente. Son superiores y así se portan en el campo cada vez que juegan. Ayer Chile, que también es una delicia futbolística, quedó eliminado y ni siquiera incomodó a la “verdeamarelha” que jugó un partido de campeón mundial. Brasil es caviar, Brasil es fútbol. Una delicia para quien quiera disfrutarla.

El plan es claro y bien ejecutado. Una defensa de cuatro técnica y físicamente potentes, preparados para salir desde atrás y para defender cualquier situación y cualquier futbolista, incluso Lionel Messi. La salida normalmente se da desde Maicon por la derecha, aunque no es la única opción. Lúcio, Felipe Melo y Michel Bastos ofrecen otras opciones válidas para Brasil, haciendo muy difícil que les compliquen en su propia mitad, tal y como intentó Costa de Marfil. La primera línea del mediocampo al ocupa el doble pivote Silva-Melo. Este último está cuajando un buen mundial, tanto con balón como sin él, mientras Silva se encuentra muy cómodo y abrigado por todo el sistema brasilero. Como interior derecho aparece Elano, quien abre el campo por derecha y aparece con más frecuencia en zona de aceleración, aprovechando el efecto “tracción” que genera la banda izquierda del equipo. Ese 4-3 le da a Brasil una coraza sólida como ninguna otra en el mundial y que permite que el trío de arriba pueda desplegar su fútbol.

Kaká y Robinho están haciendo un buen mundial, en el caso del jugador del Real Madrid, y un gran mundial en el caso del ex – merengue. Cuando la pelota llega a la banda izquierda de Brasil, el fútbol hace presencia. Robinho recibe, pausa, hace circular, aguanta la pelota, avanza, se desmarca, duerme y oxigena. Una y otra vez el rival cae ante la red de fútbol de Robinho y Kaká, y, entonces, se deciden a marcar, y la velocidad aumenta vertiginosamente, y a esa velocidad sólo ellos logran leer la jugada que termina irremediablemente en gol la mayoría de las veces. ¿Cuántos pases? Los justos ¿Cuántos regates? Los necesarios. Así avanza Brasil, y se suma Luis Fabiano para finalizar todo lo que producen las dos cracks. Y a veces se suma Elano, o Maicon, e incluso Lúcio sale disparado desde el área y se une a la fiesta. No importa cuántos sean, Brasil logra más peligro con Robinho-Kaká más Luis Fabiano que equipos que atacan con cinco y hasta con seis jugadores.

Y el resto es historia. Brasil no tiene huecos, no hay fisuras en su sistema. Defiende dónde quiere, ataca cuando quiere y llegas hasta dónde Brasil te deja. Arriba ganan siempre, por abajo también. Kaká y Robinho a las orillas en transición defensiva para el contrataque letal. Uno no logra imaginarse a Brasil perdiendo, y uno puede intuir que sólo España reencausada ó Lionel Messi podrían hacerle daño a este equipo.

Ayer jugó Alves y Brasil fue más agresivo, más vertical y más bonito. Si fuera Dunga apostaría por el jugador del Barcelona porque le da un techo más alto a Brasil, y porque le da más opciones en la base de la jugada a un Brasil que necesitaba más elaboración para ser más mortífera. Pasó ante Chile, una lástima, pero le sirvió a Brasil para dar un contundente golpe de efecto y España va a necesitar mejorar mucho para competir con eso.

Brasil es fútbol, y fútbol es el dominio total.

domingo, 20 de junio de 2010

España no puede perder la perspectiva

El Mundial de España 82’ se convirtió en un punto de inflexión para el fútbol español. La colosal impresión que dejó la selección brasilera de aquella época sirvió como punto de inicio de una revolución sociológica que llevó al fútbol español, más de veinte años después, parafraseando a Menotti, a pasar de ser toro a torero.

Un par de años después del Mundial 82’, en España nacerían dos de los mejores equipos de la historia. Primero el Real Madrid sería el escenario donde la llamada ‘Quinta del Buitre’ volaría tan alto como la imaginación de sus jugadores los llevó. Luego fue el FC Barcelona quién vio nacer al afamado ‘Dream Team’ de Johan Cruyff. Los 90’s y 00’s significaron el fin del reinado de la ‘casta y los cojones’ como sinónimos del fútbol ibérico, dando paso al ‘toque y la posesión’ como adjetivos más frecuentes cuando se escribe sobre la selección que hoy dirige Vicente Del Bosque.

Desde que dicha transición comenzó, España ha reunido las mejores nóminas y equipos de su historia, haciendo especial hincapié en el equipo que fue eliminado injustamente por Corea en 2002. Aquel equipo era liderado por el mejor jugador español de la historia en su mejor momento, y contaba con un grupo de jugadores de élite en el mejor momento de sus carreras.

Sin embargo, no fue hasta que Luis Aragonés llegó al seleccionado que España, como equipo, aceptó el cambio. Aragonés creó un equipo como nunca hecho alrededor del toque, la posesión, el centrocampismo y la técnica. El triunfo en la Eurocopa 2008 legitimó ante la afición el estilo, y el hexatriunfo del Barcelona de Pep, con Xavi e Iniesta, terminó por legitimarlo ante el mundo.

Sin embargo, España no puede perder perspectiva y pensar que su fútbol empieza y termina en el fútbol asociativo y de posesión, pues esto sería igualarlas con Argentina, Alemania o Chile en concepción, así como tampoco acusar a la selección con los típicos tópicos periodísticos como el físico, la casta, la inutilidad del fútbol de posesión y demás clichés que se han podido leer y escuchar últimamente en la red.

La titularidad de Llorente y Navas, como se ha llegado a escribir, y por mucho que yo sea un confeso enamorado de los extremos, que lo soy y mucho, serían muchos pasos atrás para el fútbol español, sería volver a esa escuela ortodoxa en la que se crió el mediocre entrenador que hoy tiene ‘La Roja’, sería perder veinte años de evolución y sería volver a ser ‘La Furia’, a ser toro y no torero. Por eso cada análisis que se haga debe ser una reflexión consciente de todo lo que implica pedir la titularidad de Navas en este momento, de creer que los problemas que presentó España en sus dolorosa e inesperada derrota fueron debido al estilo y no, como en realidad fue, a algo netamente futbolístico y que va más allá de estilos y jugadores.

Para empezar, hay que entender que España es un equipo completísimo, muy competitivo, que cuenta con varios de los mejores jugadores del mundo en cada posición y que, aunque muchos crean lo contrario, no es el Barcelona en rojo y sin Messi, sino que se trata de un equipo muy distinto y que encuentra similitudes en el estilo y en algunos jugadores, pero que en esencia y concepción está bastante alejada del equipo blaugrana y, cabe aclarar, es mejor equipo que el de Pep.

Aragonés creó un equipo hecho para competir y explotar todo el potencial de sus jugadores, ya sea desde el 4-1-4-1del partido ante Alemania, o el 4-4-2 del resto de la Euro. El toque y la posesión no eran el fin, sino el medio, y eso es algo que ha llegado a confundir incluso a los propios jugadores de la selección que ante Suiza olvidaron que era eso que los hacía jugar tan bien en Austria y Suiza, y se dedicaron a tocar y tocar el balón como fin de juego, disminuyendo muchísimo el rendimiento de varios jugadores y el rendimiento global del equipo en sí. Todo eso mientras Del Bosque esperaba pacientemente para meter a Navas a tirarle centros a Fernando Torres como patrón de juego.

La España de Luis era un equipo con una misión principal: Crearle un contexto de superioridad a Xavi Hernández, tempo y dirección del equipo. Xavi es un muy buen jugador, pero está bastante lejos de ser el mejor del mundo, aunque es un jugador que, dadas ciertas condiciones, permite dominar al rival, mas la selección de Del Bosque no le regala esas condiciones a Xavi que, atormentado por el tópico de que tiene un gran último pase, ha pasado a jugar de ‘10’ y no de interior, perdiendo espacios y teniendo siempre que recibir de espaldas. Allí Xavi pierde mucho y España también pierde como equipo, sobre todo si no juega Fernando Torres, el mejor 9 del mundo, quién era clave en el funcionamiento de España en la Eurocopa, trabajando hasta el cansancio la defensa rival y regalando metros y segundos para la segunda línea de mediocampistas, con Xavi a la cabeza.

Y aunque a partir de allí, de la desactivación y ausencia de los dos jugadores capitales del sistema, se puede comprender mucho del porqué España jugó mal ante Suiza, Del Bosque ha dejado que la selección dé más material sobre el cual basar la derrota como el hecho de que Sergio Ramos, uno de los mejores laterales del mundo y cuya importancia corriendo la banda derecha es bastante grande, se ve limitado pues tiene que recibir en estático y no en carrera, y no llega nunca a zona de aceleración porque ese espacio no se activa. Luego está la cuestionable decisión de alinear a Busquets como mediocentro y a Xabi de interior (No hay doble pivote). Xabi es el mejor mediocentro del mundo, y las excusas tópicas sobre su rendimiento defensivo son hilarantes. Sergio Busquets tiene un potencial interesante, pero hay un universo de distancia entre el futbolista del Madrid y el del Barcelona, sin contar que el blaugrana no es mediocentro de formación y las consecuencias que trae ello. Más allá del “debate” sobre quién es mejor, está el rendimiento de ambos en conjunto. Se molestan y entre los dos restan más de lo que suman pues también desactivan a Xavi.

La España de la Euro era agresiva y profunda, con los de arriba moviéndose y generando espacios y ventajas para los de atrás, mientras la España que se vio ante Suiza fue un equipo estático y que “se olvidó de las porterías”. La España de Luis atacaba y defendía desde el colectivo, mientras que la España de Del Bosque pareciera depender del talento individual.

Es increíble que la gran oportunidad de España para escribir en letras de oro su nombre en la historia del fútbol esté a cargo de Vicente Del Bosque y sus convicciones ortodoxas y tópicos erróneos. España cuenta con una nómina mejor que la de la Eurocopa y, aún así, Vicente ha sido incapaz de mantener el legado, al menos por ahora, de Aragonés.

lunes, 14 de junio de 2010

Sudáfrica 2010, primeras impresiones

Tras haberse jugado los primeros 4 grupos del mundial, y aunque ya lo suponíamos incluso antes del sorteo de grupos del mundial, tras esta primerísima fase del mundial, llena de pequeñas decepciones, ya tres selecciones han presentado candidatura oficial para ser quienes levanten la Copa del Mundo dentro de un mes: Argentina, Inglaterra y Alemania.

Messi y Maradona despertaron con Argentina

La albiceleste llegaba al Mundial de Sudáfrica llena de dudas y polémicas. Por una parte, las convocatorias, los eternos cambios de sistema y los mediocres resultados en la fase previa al Mundial habían puesto al entrenador, Diego Maradona, en el centro de las críticas a una selección de tradición y que nunca ha terminado de gustar dentro del panorama futbolístico, y, por otra, mientras Lionel Messi, el mejor jugador del mundo, Cristiano Ronaldo mediante, descollaba en su club de origen, el FC Barcelona, todas sus participaciones con su selección habían terminado, por lo menos, con un balance poco satisfactorio.

El porqué de todas esas anomalías en un seleccionado con nombres muy importantes en todas las zonas del campo es, desde la objetividad, quizá fácil de explicar, pero difícil de entender sin vivir el día a día de lo que ha sido la Argentina sin el Maradona jugador. Para empezar, la selección venía de un proceso ampliamente criticado por falta de identidad, de resultados, de “amor por la camiseta” y de oportunidades para la gente del fútbol local en las convocatorias, monopolizadas por la legión europea. Maradona, ídolo máximo argentino, no sólo a nivel deportivo, sino también desde una perspectiva global, fue elegido encargado para devolverle todo eso a Argentina, pero así como el defecto de los mismos fue blanco de críticas, los excesos de Maradona no generaron simpatía con toda Argentina. Diego trató de devolverle a Argentina sus valores futbolísticos tradicionales y mejorar los resultados de otras épocas, sin mucho éxito, aunque si se puede decir que volvió el sacrificio, y la simpatía de la gente con quiénes conformaban su selección, no desde la calidad, sino desde las ganas de vestir la elástica. Más de 100 convocados en año y medio al mando, oportunidades para todos hasta el defecto, para que todos se sintieran involucrados con el proceso y no se pudiera señalar más a los jugadores de la selección de estar allí sólo por jugar en las mejores ligas extranjeras y no por calidad real. Ese ha sido el gran éxito de Maradona como entrenador, pero a costa de que el seleccionado no tuviera rodaje y que la inmediatez no haya permitido a Maradona crear el hábitat perfecto para los llamados a liderar la selección hacía el triunfo en Sudáfrica con Messi a la cabeza.

Hasta el inicio del Mundial, Messi nunca se le había regalado a Messi un hábitat en el cual potenciar su fútbol, y en consecuencia potenciar el colectivo. Antes Argentina era una suma de individualidades que luchaban entre sí por los mismos espacios, recortándolos y disminuyéndose. Sin embargo, en el partido ante Nigeria vimos una Argentina como nunca la habíamos visto, y a un Messi como nunca lo habíamos visto en Argentina. La albiceleste jugó muy bien, aunque con problemas grande, identificables y solucionables, con Messi jugando de 10 y Tévez, Verón e Higuaín escoltándole con calidad. Tévez e Higuain trabajaron excelentemente la banda derecha y la delantera, permutando y dejando sin foco a la frágil defensa nigeriana. El nivel de asociación entre los “cracks” fue altísimo, y la transición ofensiva argentina demostró ser demoledora, a pesar de Enyeama. Argentina pudo haber goleado, haciendo justo el resultado, pero el portero nigeriano lo impidió y eso permitió que pudiéramos ver las dos caras de Argentina. La de zona de aceleración y gestación, y la defensiva y la salida pobre desde atrás; La de la banda derecha que absorbe posesión y fútbol, y la izquierda carente de implicación en el juego. Diego tiene tiempo para corregir a una Argentina que borró las dudas de muchos aficionados.

Inglaterra, Capello y Heskey no gustan, pero convencen

Inglaterra y Capello no dejaban lugar a la duda. Iban a clasificar, iban a ganar e iban a ser más favoritas que nunca gracias a la presencia del mejor entrenador de los últimos quince años (Con Cruyff no se puede competir) en el banquillo inglés. En su debut, los de Capello no causaron sensación en el aficionado de a pie, pero son el equipo más serio que se ha presentado, a falta de ver que ofrecen España y Brasil. Lejos de ser lo que a muchos nos hubiese gustado ver (Barry – Lampard en la base de la jugada, Lennon y Young en las bandas, Gerrard en la frontal y Rooney de punta único), la Inglaterra de Capello es un muy buen equipo, competitivo y que juega muy bien al fútbol, con una transición defensiva que difícilmente sea superada en el Mundial por alguno que no sean españoles o brasileños.

La selección inglesa se presenta en Sudáfrica con un 4-4-2, muy típico de los equipos de Capello, hecho para ganar, pero que en el primer partido ha dejado entrever puntos débiles muy claros dentro de un abanico de puntos no fuertes, sino fortísimos. Para empezar, Green demostró estar muy lejos de la élite, y eso significa un hándicap muy sensible para Inglaterra, comparado con los Buffon, Casillas y Julio César, e incluso los Romero, Lloris, Neuer o Sketelenburg. Con Green y el balón, que ya ha dado de que hablar, la frontal inglesa y los rebotes serán de extremo cuidado para Capello, pero es ahí, en esa zona, precisamente donde se encuentra el segundo aspecto a mejorar por el entrenador italiano. Lampard y Gerrard, sobre todo, son jugadores monumentales, geniales, mas ninguno de los dos es mediocentro, y juntos en esa posición restan más de lo que suman. No se trata de que no tengan capacidad técnica para la gestación, sino que sus movimientos sin balón no son los correctos la mayoría de las veces, tienden a estar yuxtapuestos, y no se siguen el uno al otro a nivel mental, no coordinan, y, en consecuencia, la zona de mediocentros no está siempre bien ocupada, y ninguno de los dos juega en la zona en que más hacen daño. En la segunda parte del partido ante USA, Capello adelantó un poco a Lampard, pero es una solución “parche”, más que una solución real al gran problema en el funcionamiento inglés. Gareth Barry se muestra como la carta más convincente para jugar de mediocentro, lo que significaría que Gerrard o Lampard se moverían a una de las bandas, e Inglaterra jugaría con un solo extremo. Es lo lógico y seguramente lo que hará Capello.

Por otro lado está Emile Heskey. Para la función que juega el delantero del Aston Villa, yo hubiese preferido a Bobby Zamora, pero la decisión de Capello ha salido bien, y el ‘moreno’ jugó un gran partido en el debut, manejando bien la segunda jugada y ocupando el área con inteligencia. Inglaterra, solucionado el problema del mediocentro, es el candidato más firme hasta hoy, y en torneo corto su grado de competitividad los hace más fuertes aún.

Alemania y Ozil enamoran, ganan y golean

Quien suscribe esta entrada tiene como primer equipo en este Mundial, dado que su selección no clasificó, al conjunto teutón. Ya son cinco los años en que la Bundesliga hace parte activa de mis fines de semana, en detrimento de una liga española venida cada vez más a menos, y el haber tenido la oportunidad de disfrutar de todo el proceso Klinsmann – Low, ha hecho que mi cariño por la selección germana haya aumentado: Juegan muy bien al fútbol, y ¡Me divierten!

La generación con la que Alemania llega a este Mundial es esperanzadora y emocionante. Joachim Low apostó por el cambio generacional sin perder la competitividad. Viene a ganar y no sacrifica talento por competitividad en la mayoría de los casos. Para todos aquellos afines a la Bundesliga, la exhibición de los germanos no fue una sorpresa, sino una confirmación de que las cosas se están haciendo bien. La Bundesliga crece a velocidad crucero, y es firme candidata a ser la mejor liga del mundo si la Premier se descuida.

Es imposible negar que los futbolistas alemanes siempre han tenido calidad técnica y futbolística notable. No hay que ir a ejemplos como Beckenbauer o Matthaus, sino que basta con recordar Netzer o Littbarski para darse cuenta de lo erróneo que es el estereotipo sobre el fútbol y los futbolistas alemanes. Hoy, y sobre todo en un futuro, los Tasci, Khedira, Kroos, Muller, Marin y Ozil son futbolistas buenísimos, que juegan un fútbol tan lúdico como bueno, y que copan y coparán los equipos alemanes.

Alemania regaló una exhibición de fútbol ante una débil Australia, que tuvo como elemento más fuerte la presión en el medio del campo, dominando por completo a los oceánicos, y con Ozil y Muller dando su carta de presentación como futuros, y presentes en el caso de Thomas, jugadores de equipos de la más alta élite. Lo de Ozil, en particular, ha sido la mejor individualidad de estos pocos días de torneo y ha inscrito su nombre como candidato al balón de oro del Mundial. Remarcable también el partido jugado por Lukasz Podolski y Miroslav Klose. La pareja de polacos, siempre y cuando jueguen con la elástica alemana, rinden a un nivel superlativo, y siempre marcarán goles. Podolski, en particular, hizo un partido grande, siendo agresivo, profundo y vertical (Little Hristo lo llamó alguien que conozco).

Aún con todo lo bueno, lo buenísimo y lo excelente que dejó Alemania, hay cosas, como siempre, a mejorar. Era de intuir que la falta de mediocentro iba a proporcionar ciertos problemas en la gestación de la jugada, puesto que Schweinsteiger es un jugador bastante pobre en la interpretación y lectura del partido, además de no contar con panorama alguno. Khedira, un jugador muy “Guti”, tampoco es mediocentro, sino más bien un interior “10”, no siente la posición, y, a pesar de que tiene cualidades para hacerlo, nunca fue una vía de escape a la presión australiana. Nada que no se pueda solucionar con un par de charlas, y que se solucionaría más fácilmente con la alineación de Kroos, o bien con la convocatoria y titularidad de Simon Rolfes.

Alemania juega bien, falta ver su nivel competitivo ante un rival más fuerte, aunque ya se ha asegurado un puesto como candidato “oficial”.

Outsiders y Francia: Decepción tras decepción

Difícilmente llegarán, salvo sorpresa mayúscula, a ser campeones del mundo, pero tienen la obligación de amenizar el campeonato, llegando hasta las fases de eliminación directa, y normalmente, colándose alguno incluso a semifinales.

Hasta la fecha, de los equipos que han jugado, corresponden a ese perfil los seleccionados de México, Uruguay, Corea, Nigeria, USA, Serbia y Ghana, pero sólo uno de ellos, sin contar a Corea porque servidor no ha tenido la oportunidad de verlos en acción, ha colmado las expectativas: Ghana. Los africanos, aún con sus dos jugadores de más nombre lesionados, han dejado una grata impresión, gracias a su disciplina y orden táctico, la calidad de varios de sus jugadores y su muy buena transición defensiva que, ayudado también por la falta de ideas y profundidad de Serbia, controló y anuló totalmente a su rival, a priori superior por la calidad de sus futbolistas.

México, que viene con un equipo mixto entre juventud y veteranía, decepcionó en el partido inaugural. Aunque la idea mexicana es sublime, con esa salida del balón tan característica del Lavolpismo y del fútbol mexicano, y con esa apuesta a la generación del mundial juvenil del 2005, no fue ejecutada con eficiencia por los mexicanos. Inexplicablemente, Aguirre apostó por Franco en lugar del “Chicharito” Hernández en la punta de ataque, y debido a eso México perdió muchísimo en zona de aceleración. Por otro lado Márquez no logró ejecutar su permuta entre el mediocentro del 4-3-3 y el central del 3-4-3 por razones físicas, que no futbolísticas, y fue castigado por Sudáfrica. Hace un par de años hubiese sido una apuesta segura, pero hoy día es un hándicap. En pro de solucionarlo, y sin cambiar el sistema, Osorio podría cambiar de puesto con Márquez sin perder calidad.

Uruguay y USA dejaron una imagen esperanzadora por los sistemas empleados, aunque una actitud muy conservadora les obligó a rendir por debajo de sus posibilidades. Uruguay con su 5-3-2 no jugó un mal partido, pero pensaron demasiado en el rival y los laterales condicionaron negativamente la transición ofensiva uruguaya por su miedo a correr la banda, mientras que USA presentó un equipo capaz de competir, organizado y bien dirigido que no supo aprovechar la falta de mediocentro en Inglaterra, que Donovan pudo haber explotado, por tener más en mente defender la banda que atacar.

Párrafo aparte para Francia que con Domenech ha dejado bien claro que no son candidatas del Mundial, a pesar de que por jugadores y jerarquía deberían serlo, puesto que no han logrado hacer un equipo, sino que son una suma de individualidades muy al estilo Argentina – pre Mundial, pero sin Messi, ni Tévez ni Agüero, y sin Nasri y Benzema tampoco.

sábado, 12 de junio de 2010

Adriano, última oportunidad


Se ha confirmado hace unos días el fichaje de Adriano Leite por la Roma. Para quien escribe, cuando Adriano jugaba en el Inter era el jugador que, perfilado hacia portería, más pánico debía causar al rival, sólo tras Ronaldo, aunque contra él no se puede competir. El Adriano del Inter era un jugador colosal, pero ese Adriano ya no está más. Adriano, por más que los tifosi de la loba lo hayan recibido con la leyenda Ave Imperatore, no es más El Emperador.

Antecedentes Adriano

Acusado por problemas de depresión, las lesiones y alcoholemia, Adriano bajó su rendimiento en el Inter, perdió la titularidad, se alejó del fútbol y se encerró en su círculo más cercano de amigos. Adriano volvió a Brasil para sumarse al Sao Paulo y el sueño tricolor de ganar la Libertadores 2008. Tuve la suerte de poder ir a verlo en directo en uno de los partidos de la fase de grupos y me alegré mucho viendo a un Adriano feliz, aunque lejos de su nivel de antaño. Durante su estancia en el equipo paulista, Adriano marcó 17 goles en 28 partidos, volvió a estar en forma, a jugar buenos partidos, y su fútbol iba en ascenso. Su vuelta al Inter fue satisfactoria en un comienzo, bajo la protección de Mourinho, pero los fantasmas del pasado regresaron y en Abril del 2009 rescindió, finalmente, su contrato con el Inter de Milán. Regresó al Flamengo, el club que lo vio nacer, y Adriano se declaró feliz. Un par de escándalos, nada extraordinario, y Adriano comenzó a responder en la cancha, siendo el goleador del Brasileirao 2009, que ganó su club, con 19 goles, y ayudando al Flamengo a avanzar hasta cuartos de final en la Libertadores 2010 con cuatro goles, tres de ellos en fases finales.

Antecedentes Roma

Una crisis de lesiones había dejado a la Roma de Spalletti sin ningún efectivo en la delantera en medio de la temporada. Ese incidente provocó que Luciano se la jugara con un 4-6-0, con un pivote, dos interiores, dos mediocampistas de banda y un Totti flotando en ¾ de cancha. La Roma de Spalletti se convirtió en un imperativo para todos los amantes del fútbol, definidos por Enric González como un equipo presdigitador, haciendo alusión a los constantes desmarques de la gente de arriba que distraían a los contrarios y permitían a la Roma jugar un fútbol de pase y posesión bastante lúdico y efectivo.

Sin embargo, en algún momento las cosas dejaron de funcionar en el equipo de la loba, y tras la salida de Spalletti, Claudio Ranieri se convirtió en entrenador de la Roma. Ranieri está bastante lejos de ser tan “genial” como Spalletti, y sus equipos siempre han estado más atados a lo convencional que a la excitante innovación. Sin un delantero centro de escuela en la plantilla, Ranieri tuvo que esperar hasta el mercado de invierno para traerse cedido hasta final de temporada al ‘9’ italiano por excelencia de los últimos años, Luca Toni, quién se encontraba “marginado” en el Bayern Munich. Toni le dio a nivel táctico lo que quería: Juego aéreo, juego de espaldas y presencia en el área, pero el juego del ex-Fiorentina no ha sido el mejor, resultando decepcionante por falta de goles y de ese plus que un delantero de su categoría debe aportar y que no pueden otros de menor jerarquía.

¿Qué esperar de Adriano?

Adriano llega a la Roma tras haberse reencontrado consigo mismo en Brasil. Obviamente ya no tiene la potencia que tenía cuando estaba en el tope de su carrera, ni la misma velocidad, pero sigue siendo un jugador interesante. Físicamente es un argumento importante por altura y fuerza, aunque se ha convertido en un jugador pesado, y a diferencia del Ronaldo del Real Madrid, como paradigma moderno del jugador “pesado”, no goza del mismo cambio de ritmo de antes, por lo que no debemos esperar goles en carrera eludiendo rivales como en antaño. El campo de acción de Adriano ha disminuido, convirtiéndolo en un hombre más de área y con un impacto minúsculo en la gestación de la jugada. Aparte de eso, Adriano sigue siendo el mismo de siempre. Posee una cantidad inagotable de registros técnicos para definir, su musculatura y capacidad técnica le habilitan para jugar de espaldas bastante bien, además de que tiene juego aéreo, y su zurda sigue siendo un diamante, tanto con balón en movimiento como con pelota quieta.

La Roma por su parte está urgida de un delantero centro y Adriano ha significado sin duda la opción de garantía futbolística más barata del mercado. Si eventos extra deportivos no entorpecen la relación Adriano-Roma, esta puede convertirse en uno de los mejores fichajes de la temporada, y Adriano, que ya no volverá a ser el del Inter, habrá logrado la redención. La única duda deportiva que me genera es si Adriano podrá readaptarse al ritmo europeo, mucho más alto que el sudamericano.

Por último, un vídeo para recordar a L’Imperatore:

viernes, 11 de junio de 2010

Sudáfrica 2010: Grupo H


Con en análisis del Grupo H terminamos a escasos minutos para que empiece el Mundial con el repaso a todas las selecciones que estarán en Sudáfrica. En este último grupo hay dos claras favoritas; España y Chile. Ambas selecciones practican un fútbol vistoso y en el que el protagonista es el balón, con lo cual podemos decir que casi todos los partidos de este grupo van a ser bastante bonitos para el espectador.
España ha vuelto a tener suerte en el sorteo como ya lo tuviera en la fase de clasificación, pero sin embargo se ha visto muy perjudicado en el cruce de Octavos, donde con casi total seguridad se tendrá que enfrentrar a una de las aspirantes al título.
Chile por su parte intentará ganar los dos primeros partidos para llegar al choque frente a España clasificada y luchando por la primera plaza del grupo. Así evitaría al campeón del grupo G, cuyo favorito es la Brasil de Dunga.
En el otro lado Suiza y Honduras, con escasas probabilidades de clasificarse aunque con la ilusión intacta. Dos bloques que sufrieron hasta el último minuto para meterse en el Mundial y que tendrán que jugar muy por encima de sus posibilidades para poder llegar con alguna opción a la tercera jornada.
Especialmente destacable es el caso de Honduras, que estuvo eliminada hasta el minuto 94 del partido entre Costa Rica y Estados Unidos, hasta que los americanos consiguieron empatar en el descuento dándole así su billete para Sudáfrica a los hondureños.
Por lo tanto, un grupo en el que no parece que vaya a haber sorpresas pero con la seguridad de que pase quien pase tendrá un durísimo rival en Octavos de Final.


España

Nuestra selección se ha convertido por méritos propios en una de las favoritas para alzar la Copa del Mundo en Johannesburgo dentro de exactamente un mes. Con la confianza del éxito cosechado en Austria y Suiza y el relevo en el banquillo, España ha conseguido una fase de clasificación perfecta y Vicente Del Bosque, pese a algunas decisiones que podrían ser discutidas, ha conseguido seguir con el estilo impuesto por Luis Aragonés aparte de mejorar algunas posiciones y el fondo de armario.
España ha cambiado poco en los últimos dos años. El once inicial sigue siendo el mismo con la excepción de Marchena y Senna, que se han visto superados por la extraordinaria aparición de Piqué en el caso del andaluz y por el buen momento de forma de Xabi Alonso, Busquets y Javi Martínez en el caso del brasileño. Lo cierto es que el bajón físico de Senna y las continuas lesiones que ha tenido este año son dos factores que también han influído en la decisión de no llevarle a Sudáfrica.
España, por tanto, ha mejorado el once y tiene más alternativas en el banquillo. La presencia de gente como Cesc, Navas, Mata, Pedro o Llorente nos dan un gran abanico de posibilidades en caso de tener la necesidad de darle un giro al partido. Llorente ya ha demostrado frente a Inglaterra o Arabia Saudí que será importante en el juego aéreo, y Navas también ha demostrado un gran rendimiento pegado a la línea de cal, con una función diferente a la que habitualmente ejercen Silva e Iniesta.
Las únicas dudas del equipo español están en el esquema a utilizar. Con la duda del estado físico de Torres, hay la posibilidad de cambiar el habitual 4-4-2 por un 4-1-4-1. Con éste último esquema nace la polémica, ya que mientras Luis Aragonés prefería alinear a Cesc en caso de fallar alguno de los delanteros parece que Del Bosque opta por meter un medio defensivo más como es Busquets para adelantar a Xabi a la posición de creador teniendo así más fortaleza defensiva.
En caso de recuperación total de Torres y ante grandes selecciones, aún no sabemos si el seleccionador optará por sentar al delantero de Fuenlabrada para meter a Busquets o se arriesgará con el 4-4-2 que tantas alegrías nos dio en la Eurocopa de Austria y Suiza.
Sea cual sea el esquema utilizado, está claro que España tiene permiso para soñar. Es la mejor generación que ha tenido nunca el país y por fin hay un grupo ganador. Será vital el cruce de octavos, donde con casi total seguridad nos tendremos que enfrentar a Brasil o Portugal. En caso de pasar esa eliminatoria, las opciones de La Roja crecerían muchísimo y el sueño cobraría más fuerza todavía.

Chile

Como comentábamos hace unos días, Chile ha conseguido volver a un Mundial doce años después gracias a la grandísima labor de su entrenador, el argentino Marcelo Bielsa. Desde su llegada hace tres años, ha apostado por la juventud formando así un grupo jóven pero muy competitivo que consiguió acabar en el segundo lugar de la fase de clasificación sudámerica con tan solo un punto menos que Brasil.
La filosofía de la que ha impregnado a este combinado no puede ser más bonita para el espectador. Chile es un conjunto que trata de hacer un fútbol ofensivo, bonito, de posesión y continua movilidad para poner en aprietos al rival, para gustar al público y para gustarse a si mismo. Su 3-4-3 ha convencido a todo el país que confían por fin en hacer algo importante en Sudáfrica.
Por lo tanto, balón a ras de suelo, rápidas combinaciones en busca de espacios, muchísima movilidad y versatilidad en todos sus hombres, y balones a los jugadores más imaginativos para que estos resuelvan. Así podríamos definir a esta selección chilena. Principal candidata a acompañar a España hacía los Octavos de Final.
Sin embargo, es un esquema muy exigente y que también le trae problemas. Los 22 goles encajados en los 18 partidos de la fase de clasificación así lo demuestran. Los centrales tienden a descuidar los costados por tanto los jugadores de banda del equipo rival suelen hacer mucho daño. Por ello, las ayudas de los interiores resultan vitales para el buen funcionamiento defensivo del equipo.
En caso de ponerse por encima en el marcador, Bielsa suele ordenador un cambio táctica pasando a jugar con cuatro atrás pero con una apuesta de juego similar a la anterior en la que el principal protagonista es el balón. Ya formen la zaga 3 ó 4 defensores, no tengan dudas de que Chile siempre buscará la porteria rival y ser el dueño de la pelota.
El gran inconveniente que se ha producido en los últimos días es la lesión del máximo goleador del equipo, el Chupete Suazo. No se sabe si el fantástico delantero podrá ser de la partida en esta primera fase, pero se espera que llegue a las eliminatorias. Su ausencia provoca varios cambios en Chile y los beneficiados podrían ser Valdivia y Matías Fernández ya que dejarían de luchar por la posición de '10' y ambos jugarán de inicio. Es probable que sea Alexis Sánchez quien ocupe la posición de punta dejando a Matigol escorado a banda derecha.
Chile sueña con un gran Mundial y es normal visto lo visto en la fase de clasificación. Todo lo bueno que les pueda pasar se lo deben al hombre que ha revolucionado el fútbol chileño hasta convertirlo en uno de los más atractivos que se puedan encontrar este mes en Sudáfrica. No es otro que Marcelo Bielsa.

Suiza

La selección suiza se ha mostrado como un conjunto bastante débil durante toda la fase de clasificación. Tuvo la gran suerte de estar encuadrada en un grupo formado por selecciones paupérrimas como Letonia, Israel, Luxemburgo y Moldavia en el cual el único rival que le podía complicar la clasificación era Grecia. Finalmente los de Hitzfeld consiguieron acabar como primeros pese a algunos resultados bochornosos como la derrota en casa frente a Luxemburgo (1-2) o los empates frente a Israel y Leotnia.
Por lo tanto, no se espera mucho de la selección suiza que, sin embargo, sí lo hizo bien en su último Mundial. Recordemos que se fue de Alemania en Octavos y sin haber encajado ni un solo gol en toda la competición, siendo así el primer equipo en la historia de los mundiales que cayó manteniendo la porteria a cero en todos sus partidos. En su Eurocopa, sin embargo, si defraudó y no consiguió pasar de la primera fase.
Hirzfield apuesta por un juego muy directo, en el que la corpolencia de los delanteros y las llegadas desde atrás de los hombres de banda son los dos puntos vitales para el correcto funcionamiento ofensivo del equipo. En la fase defensiva sufren más por la tendencia de la zaga a meterse muy atrás y las escasas ayudas que reciben los laterales. Su máxima estrella, Gokhan Inler, será la clave para que el equipo suizo pueda recuperar rápido y no pasar excesivos problemas.
Por lo tanto, no esperen ver buen fútbol por parte de Suiza ya que es muy extraño que se de esta circunstancia. No tienen ningún mediocentro creador y el único futbolista con la calidad e imaginación suficiente es Tranquillo Barnetta, que no acaba de explotar en la selección y además se ve muy escorado a la banda.
Lo mejor del conjunto suizo quizá las alternativas con las que cuentan en el banquillo, y es que Senderos, Behrami, Gelson Fernandes o el mítico Hakan Yakin ofrecen un gran abanico de posibilidades para cualquier partido, según se necesite mantener un resultado o cambiar un encuentro.
La delantera también es uno de los puntos fuertes del equipo suizo. Aún no se sabe quien formará la pareja de delanteros titulares, pero tanto Frei como N'Kufo o el jóven Derdiyok aseguran lucha, goles y buen juego de espaldas, algo vital para triunfar en esta selección suiza.
Pocas posibilidades tienen de conseguir el pase, pero si frente a Chile tienen su día todo puede pasar.

Honduras

La selección hondureña jugará su segundo mundial 28 años después de que se estrenara en el de España'82 consiguiendo un empate muy celebrado contra los anfitriones. Con su técnico Reinaldo Rueda a la cabeza, los hondureños sueñan con hacer valer la mezcla de músculo y calidad que les han hehco llevar hasta aquí para superar la Primera Fase y meterse en Octavos de Final. Es casi una utopía pensar en esa posibilidad, pero la ilusión no se la va a quitar nadie.
El equipo hondureño se sustenta gracias a su doble pivote, donde tienen a los que seguramente son sus dos mejores jugadores; Wilson Palacios y el veterano Amaro Guevara. Ambos se complementan a la perfección ya que Palacios es un porteto físico (no excento de calidad) y Guevara es el hombre que marca los tempos en este equipo, el jugador con más talento y el que debe manejar todo el fútbol ofensivo de los hondureños.
Junto a él, es De León el hombre que suele combinar en el centro del ataque. El jugador del Parma (cedido este año en el Torino), empieza en banda pero tiene la tendencia de venirse al medio. En el otro lado estará Edgar Álvarez, jugador totalmente opuesto. Éste aprovecha su velocidad para encarar y debería ser uno de los principales peligros del equipo hondureño en ataque.
La pareja de delanteros tras la lesión de Costly estará formada por Carlos Pavón y el ex-interista David Suazo, un jugador que no termina de convencer con la selección. Son una pareja de delanteros que se entiende a las mil maravillas y tienen un gran desmarque. Saben como poner en apuros a la defensa y tienen gol.
Atrás, una defensa muy sólida que apenas se permite subidas al ataque. Chávez y Figueroa forman una gran pareja de centrales y los laterales son algo más débiles.
El equipo hondureño ha crecido gracias a la gran cantidad de jugadores que está apareciendo en Europa últimamente. A los que ya están, habrá que sumarles en breve a algunos futbolistas más que suenan muy fuerte para recalar en nuestro continente, especialmente en la Premier. Esto les convierte en un equipo competitivo capaz de luchar contra cualquier equipo.
Es muy díficil que pasen de la primera fase, pero para ellos sumar un punto ya sería algo muy positivo.

jueves, 10 de junio de 2010

Caverna Mediática en Radio Deportiva


Tan solo faltan unas horas para el inicio del acontecimiento futbolístico del año, el Mundial de Naciones. Desde Caverna Mediática ofreceremos la mejor cobertura posible gracias a nuestros colaboradores, pero la gran novedad en el blog será la unión con RadioDeportiva, la radio deportiva independiente líder en internet y donde se podrá vivir el Mundial las 24 horas del día.

Desde RadioDeportiva y con la colaboración de varios de los bloggers y periodistas más destacados de nuestro país, viviremos las retransmisiones en directo de todos y cada uno de los partidos. Hoy, Jueves, tendrá lugar la presentación oficial de la plataforma mundialista a traves de RadioDeportiva. El acotencimiento tendrá lugar a las 22:00 y se podrá escuchar, al igual que el resto de la programación accediendo a este link.

Pero la cosa no queda ahí. Presentamos también, Virus Mundial.

Virus Mundial

Anunciamos oficialmente que con motivo de la celebración del Mundial 2010 del 11 de junio al 11 de julio en Sudáfrica, la emisora on-line RadioDeportiva apostará 100% por un espectáculo inmenso y global como es el Mundial de fútbol dando una cobertura plena las 24 horas del día, con retransmisiones de los partidos, podcasts, análisis y en especial con su programa VIRUS MUNDIAL que servirá de corolario diario de la jornada mundialista.

VIRUS MUNDIAL tendrá una duración aproximadamente de 60 minutos y será un programa diario de 22.30 a 23.30 dirigido y presentado por Borja Pardo (Football Vintage) y co-presentado por Agustín Devoti (ESPN Argentina). Será una especie de “sanedrín de sabios” sobre fútbol internacional en un ambiente relajado y distendido con buena música y participación de los oyentes.

El programa se emitirá por internet, con el servidor del que dispone RadioDeportiva. El programa será en riguroso directo y tendrá mensajes de los oyentes via facebook y twitter del programa. El link para escuchar el programa será este: http://www.radiodeportiva.net/player/

La aventura sudafricana arranca este viernes 11 de julio a las 22.30 en la sintonía de RadioDeportiva y ya podéis vivir los prolegómenos en el grupo facebook de VIRUS MUNDIAL y en el twitter @virusmundial Allí nos encontraremos cada noche.